Lo siento soy una ridícula, no puedo cambiar pero ¿A quién no le encantaría recibir una de estas? Nada te dice «Te quiero» como un pedazo de madera tallado con un corazón.
Lo encuentran aquí
Lo siento soy una ridícula, no puedo cambiar pero ¿A quién no le encantaría recibir una de estas? Nada te dice «Te quiero» como un pedazo de madera tallado con un corazón.
Lo encuentran aquí